Los tratamientos para el cáncer de los niños podrían provocar problemas cardiacos

Los niños que sobreviven al cáncer con frecuencia experimentan cambios en sus arterias relacionados con el tratamiento, que podrían ponerlos en riesgo de enfermedad cardiaca mientras aún están en la niñez, señala un estudio reciente. El hallazgo sugiere que los médicos deben vigilar más pronto a estos pacientes, y gestionar los factores de riesgo de las enfermedades cardiacas mientras aún son jóvenes.


"La investigación ha mostrado que los supervivientes a cánceres infantiles se enfrentan a problemas de salud cardiacos y de otro tipo décadas tras el tratamiento", comentó en un comunicado de prensa de la Asociación Americana del Corazón (American Heart Association) el autor del estudio, Donald Dengel, profesor de quinesiología de la Universidad de Minnesota en Minneapolis. "Pero los investigadores no habían, hasta ahora, observado los efectos sobre la salud cardiaca del tratamiento del cáncer infantil mientras los supervivientes seguían siendo niños".

Los investigadores evaluaron la rigidez, el grosor y la función arterial de más de 300 niños de ambos sexos de 9 a 18 años de edad, que habían sobrevivido al menos cinco años desde su diagnóstico de leucemia o tumores cancerosos. Las arterias son vasos sanguíneos que transportan la sangre desde el corazón.

Esos pacientes fueron comparados con más de 200 de sus hermanos que no tenían cáncer.

Los supervivientes del cáncer infantil tenían más probabilidades de sufrir un declive en la función arterial que indicaba una enfermedad cardiaca prematura, según el estudio, que fue presentado el domingo en la reunión anual de la Asociación Americana del Corazón, en Dallas.

Los investigadores también hallaron que los supervivientes a la leucemia infantil experimentaban un declive del 9 por ciento en la salud arterial tras completar la quimioterapia, en comparación con los niños sin cáncer.

"Dado este aumento en el riesgo, los niños que sobreviven al cáncer deben realizar cambios en el estilo de vida para reducir el riesgo cardiovascular", aconsejó Dengel. "Los proveedores de atención de salud que gestionan a los supervivientes de cánceres infantiles tratados con quimioterapia deben vigilar los factores de riesgo cardiovascular tras la terminación de la terapia oncológica de sus pacientes".

La mayoría de los niños del estudio eran blancos, así que los hallazgos quizás no apliquen a otros grupos raciales y étnicos. Los investigadores tampoco pudieron vincular los cambios cardiacos con ningún agente específico de quimioterapia.

La tasa de supervivencia a cinco años a los cánceres infantiles en EE. UU. aumentó de alrededor del 58 por ciento en 1975-77 a alrededor del 83 por ciento en 2003-09.

Los datos y conclusiones presentados en reuniones normalmente son considerados como preliminares hasta que se publiquen en una revista médica revisada por profesionales.


Artículo por HealthDay, traducido por Hispanicare

FUENTE: American Heart Association, news release